Siguiente especie
Descripción de la especie
La anona, anono o chirimoyo
Nombre científico: Annona cherimola
Familia botánica: Annonaceae
Cuenta una leyenda inca que una vez vivió un valiente guerrero de nombre Rumi Ñahui, que además de ser fiero y noble también era muy bondadoso y compasivo. Al morir en cruenta batalla contra los españoles, fue enterrado como todo un héroe y sobre su tumba se dejó clavada su arma de madera, la cual se transformó en un árbol cuyos frutos eran dulces y con idéntica forma a un corazón humano.
Es un árbol nativo de las regiones andinas de Colombia, Ecuador y Perú. En Perú propiamente se le ha cultivado desde hace más de 2000 años, encontrándose inclusive encontrado grabados de su fruto en vasos de barro en tumbas incas muy antiguas.
En Costa Rica se introdujo hace muchísimos años, y era común observarlo en los patios, cercas, potreros y cafetales de las fincas del Valle Central, especialmente de aquellas de zonas con climas frescos, arriba de los 1200 m de elevación hasta más o menos los 1800 a 2000 m. Lamentablemente en estos momentos es una especie que puede ser considerada como “desplazada culturalmente” porque, aunque se reproduce fácilmente son pocas las personas que se interesan por cultivarla.
La anona es un árbol pequeño que muy raramente sobrepasa los 8 m de altura, de crecimiento lento y cuando está en lugares muy lluviosos no tiende a florear porque necesita un periodo seco para estimularla, e igualmente no le gustan los lugares muy calientes no venteados. En cuanto a suelos prefiere aquellos bien drenados y ricos en materia orgánica.
El tronco es relativamente delgado y es común que se bifurque a baja altura, desarrollando troncos múltiples y ramas desde muy abajo, por lo que tendrá una copa baja, densa y redondeada. La corteza es grisácea y las ramas poseen muchas lenticelas y cicatrices de las ramitas que se han caído. Las ramitas presentan un crecimiento en zigzag típico de las Anonáceas, lo que permite ayudarse a identificar esta familia.
Las hojas son simples, alternas, de forma ovalada, textura suave y delgadas, con el borde entero y de color verde por encima y glaucas por detrás. Son muy pubescentes, especialmente notable en las hojitas nuevas que se pueden ver casi blancas o muy marrones dependiendo de la coloración de esta pubescencia. La nervadura es amarillenta y muy evidente por detrás.
Las hojas que están cerca de la punta de las ramitas son mucho más grandes que las otras y las hojitas nuevas se presentan inicialmente cerradas (borde con borde) y luego se van abriendo hasta quedar totalmente extendidas. Las ramitas nuevas y los peciolos son pubescentes y estos últimos son curvos en la unión con la lámina, lo que hace que la hoja se vuelque hacia abajo.
Y aunque las flores no son tan vistosas ni hermosas como tantas otras, por eso la mayoría de las personas no las conocen, pero ellas tienen lo suyo y son muy curiosas por la forma que poseen. Están formadas por 6 pétalos carnosos, gruesos y verde amarillento por fuera y mucho más claros por dentro, 3 son grandes de forma alargada y los otros 3 son pequeños y están un poco escondidos en el centro de la misma.
En el centro de la flor está una estructura redondeada y compacta formada por unos 200 estambres, acomodados de la punta hacia abajo en filas y en la parte de abajo se encuentran los pistilos femeninos, también en filas.
La estrategia que utiliza la anona para no autopolinizarse, se denomina dicogamia, en donde los estambres maduran en diferente momento que los pistilos. Los pistilos están receptivos apenas se empieza a abrir la flor y cuando ella ya está totalmente abierta, ellos dejan de ser fértiles, pero los estambres en ese momento es que empiezan a liberar el polen. Por ello, es que a pesar de que el árbol puede llegar a tener muchas flores, son muy pocos los frutos que se producen.
Las flores nacen en las axilas de las hojas en forma solitaria o en pequeños grupos de 2 o 3 individuos y liberan un delicado aroma que atrae a los escarabajos que son sus principales polinizadores. Los sépalos son de forma cuadrada y color verde oscuro, de menos de 5 mm de largo, y al igual que los pétalos, están cubiertos por una fina pubescencia marrón. El pedúnculo que sostiene a la flor es grueso y curveado lo que hace que ésta quede hacia abajo.
El fruto de la anona, es uno de esos frutos que no requiere presentación y es que, desde los patios de los abuelos, ha sido uno de los preferidos de quienes han tenido la bendición de tenerlo en sus manos y degustar su exquisita pulpa blanca. Son grandes y carnosos, de forma redondeada y pueden llegar a medir unos 10 cm de diámetro. La cáscara es de color verde con una serie de diseños como escamas y este color verde se mantiene, aunque el fruto esté muy maduro.
Los frutos están formados por varios carpelos y en cada uno de ellos hay una semilla, si ésta no logró formarse el carpelo no se desarrolla, por lo que la forma redondeada del fruto tampoco se dará, de ahí que muchas veces se ven frutos “deformes” o con formas no redondeadas. Un fruto totalmente redondo, indica que todas las semillas lograron cuajar. Es por ello que es casi imposible describir adecuadamente la fruta, pues su apariencia varía mucho de un árbol a otro y de una zona a otra, y las hay de cáscara o piel completamente lisa o con grandes marcas hexagonales, hasta las que están cubiertas de apéndices semejantes a dedos cortos.
Lo más atractivo de estos frutos es la exquisita pulpa blanca que envuelve las semillas, la cual es muy jugosa, dulce y de textura levemente “arenosa” al paladar. Ella es altamente nutritiva, rica en vitamina B1, B2, B3, B5, B6, C, E, ácido fólico, calcio, hierro, magnesio, fósforo, manganeso, potasio, sodio y zinc. Es rica en azúcares, fibra y proteínas.
Estos frutos tienen la ventaja que se pueden obtener del árbol, ya sazones, aunque no estén maduros y se envuelven en papel periódico para que maduren sin dañarse, tomando en cuenta que la cáscara es sumamente delgada, por lo que es muy fácil que el fruto se dañe por una mala manipulación o transporte.
Las semillas son de forma elíptica, de color negro o café brillante, de unos 2 cm de largo y con una cáscara muy dura. Son abultadas y poseen el borde muy grueso.
Se reproduce por semillas, las cuales presentan una germinación muy dispareja, en donde incluso se puede dar el caso de semillas que germinar luego de dos o tres años de sembrada. De ahí que se recomiende, aplicarles algún tratamiento pregerminativo, para acelerar y unificar la germinación. Entre los tratamientos a utilizar está el poner las semillas en un recipiente y echarles agua hirviendo a borbollones y dejarlas a que reposen en ella por unas 12 h, luego se cambia el agua y se dejan otras 24 horas y así por unos 3 días. El agua ayudará a ensuavizar la testa o cáscara, permitiendo que el agua llegue hasta el embrión. Otra forma es cortándole una pequeña sección a la semilla y dejándolas en agua ambiente por 24 horas.
Se debe tener presente que las semillas se deben sacar de la pulpa y limpiar muy bien antes de tratarlas o almacenarlas, si se desea mantenerlas para germinarlas más adelante, tomando en cuenta que se pueden mantener viables hasta por 3 años, sin mayores pérdidas de germinación.
Otra forma de reproducción es por medio de injertos, acodos y estacas de 1 a 1.5 cm de diámetro, lo que garantiza mantener la calidad de la fruta.
Los amantes de estos frutos los buscan con afán, ya sea para consumirlos como fruta de mesa, o para preparar helados, licores, jugos, postres, ensaladas de frutas o cremas. Aunque cabe indicar que la pulpa al exponerse al aire se oxida rápidamente, por lo que se recomienda consumirla de inmediato para que no pierda su atractivo color blanco.
La anona ha sido utilizada en la medicina popular desde la época de los Incas, y actualmente se utiliza para eliminar los piojos por sus propiedades insecticidas, así como en problemas de memoria, anemias y osteoporosis. Es una fruta recomendada para las embarazadas, los niños y adultos mayores, por su alto valor nutricional. También posee propiedades antibacteriales, digestivas, laxantes y relajantes. También hay que señalar que su uso debe ser muy cuidadoso porque tanto las semillas como las hojas son tóxicas al contener annonacina.
Es una especie ideal para utilizarse en parques, jardines y parqueos, y aunque no posee flores llamativas, es fácil de manejar, no es exigente, se le puede podar para mantenerle una forma adecuada, aprovechando que rebrota muy bien, pero sobre todo que se le pueden aprovechar los frutos.
Al tener raíces superficiales se beneficia de fertilizaciones periódicas de materia orgánica, por lo que se recomienda, colocar en su base desechos de cáscaras, recortes finos de la “basura” del jardín, hojarascas y demás, pero con el cuidado de estarla revolcando continuamente, para que no se pudra, sino que se vaya descomponiendo y liberando los nutrientes al suelo, en donde el árbol pueda irlos absorbiendo.
Cuando los españoles conocieron a la anona le llamaron el manjar blanco por el delicioso sabor de su pulpa, y tuvo tanto éxito en España, que desde el siglo XVIII se empezó a cultivar, llegando a la actualidad a ser el primer país productor de este fruto.
Un detalle interesante es el hecho de que el libro sagrado de los Mayas, el Popol Vuh menciona a la anona como uno de los frutos que encontraron los progenitores en la nueva tierra, por lo que puede ser que sea otra especie de anona, o bien se puede esperar que México sea un punto de origen secundario de esta especie.
Dentro de esta familia Annonaceae también se encuentran especies como el ilán ilán (Cananga odorata), el palanco (Sapranthus palanga) y la soncoya (Annona purpurea).
A la reina de las frutas tropicales, como algunos le llaman, en otros países se conoce como: anón de manteca, anona blanca, anona de tierra fría, anona del Perú, anona do Chile, anona poshte, anone, araticú, aratiku, cabeza de negro, cachimán, cachimán de la China, catuche, cherimalla, cherimoia, chérimole, cherimolier, cherimóloa, cherimoya, cherimoyabaum, cherimoyales, cherimoyer, cherrimoyo del Perú, chicatuche, chirimola, chirimorrinón, chirimoya, chirimoyo del Perú, corazón, corossol du Perou, custard apple, fruta do conde, girimoya, mamón, masa, momona, pac, perunischer fraschenbaum, poshte o pox.
Etimológicamente Annona se refiere al nombre que le daban los nativos del Caribe a este tipo de árboles y cherimola, tiene su origen en dos términos quechuas “chiri” frío y “muya” huerto, “chirimuya” en relación a que este tipo de árboles se desarrolla en lugares fríos.