Laurel

El laurel

Nombre científico: Cordia alliodora

Familia botánica: Cordiaceae

El laurel es un árbol muy humilde e importantísimo que encontramos en casi todo el territorio nacional desde el nivel del mar hasta los 1000 m o 1200 m de elevación. Pero no es una exclusivo de Costa Rica, ya que se le encuentra desde México hasta Suramérica.

Es una especie, que por lo general, presenta una altura de unos 40 m y un tronco muy recto y limpio, ya que sus ramas empiezan muy arriba, lo que le da una copa estrecha y compacta, formada por muchas hojas simples, alternas, con una textura áspera y ramitas que terminan en un abultamiento, de donde salen otras ramitas más delgadas. Estos abultamientos, llamados “formicarios” son desarrollados por el árbol para alojar hormigas, para que le ayuden en su protección, a cambio de comida y casa. Estos formicarios son un elemento ideal para identificar la especie y culturalmente eran usados por las señoras de campo, ya secos, como molinillos para batir bebidas, especialmente el chocolate.

Otra de las características del laurel, son sus bellas flores blancas, que empiezan a observarse a principios de año, contrastando con el verde de las hojas y en donde son ampliamente visibles para los polinzadores, especialmente abejas e insectos. Lo cual lo hace ser una especie ideal como árbol ornamental para parques y grandes jardines, orillas de calles, bordes de caminos y de ríos. Los frutos por su parte son muy llamativos, porque son como un grano de arroz que mantiene en su extremo los pétalos, ya secos de la flor, que utiliza como una especie de hélice para desplazarse con el viento y poder colonizar sitios más lejanos.

Se reproduce fácilmente por semillas creciendo sobre los potreros y abandonos como si fuera una hierba, formando bosques o rodales puros en muy pocos años. Esta forma de “reforestación” natural ha sido aprovechada desde hace muchos siglos por los finqueros del país, especialmente por su valiosa madera que presenta excelentes propiedades físicas, que la ubican como una madera moderadamente pesada, de color crema o amarillenta con hermosas vetas más oscuras, grano recto y textura fina con buen lustre, por lo que es utilizada en construcción de paredes, vigas, artesanados, tablillas, pisos, chapas, plywood, mueblería y gabinetes, puentes  y durmientes de ferrocarril. Sin contar su uso como leña de alta calidad, porque no produce mucho humo y dura mucho quemándose.

Aparte de su madera, los árboles de laurel -principalmente los que se desarrollan en la región del Pacífico Norte y Valle Central de Costa Rica- poseen una corteza clara muy áspera y rugosa que resulta excelente para “pegar” y cultivar plantas ornamentales epífitas o trepadoras, como bromelias, orquídeas, cactos, helechos, vainilla, pimienta, etc., de tal manera que en un espacio muy reducido y con la presencia de unos pocos árboles de laurel, se podría crear magníficos jardines colgantes con plantas ubicadas en varios estratos a lo largo de los troncos de éstos. ¿Cuánto costaría una estructura similar construida con hierro, cemento o varilla?

Etimológicamente el género Cordia es en honor Valerius Cordus, quien fue un famoso botánico alemán y alliodora procede del latín y significa con olor a ajo.